El estado de alarma decretado a raíz de la pandemia ha supuesto un golpe muy duro para el turismo español, que solo durante el mes de marzo llegó a perder casi el 65% de los viajeros internacionales. Estos datos, facilitados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), no han variado demasiado desde entonces; y es que a pesar de que muchos países han vuelto a abrir sus fronteras, el miedo al contagio y la gran crisis económica han hecho que la mayoría de turistas no se hayan movido de sus respectivos países.
Esta situación también ha repercutido en el sector de los pisos turísticos, que en los últimos años se había convertido en uno de los más sólidos y rentables. En España, de media, solían hacerse más de 140 mil reservas semanales. El boom fue tan grande que muchas ciudades se vieron obligadas a regular el sector y a reducir, o incluso parar, el número de licencias que se otorgaban.
Estas 140 mil reservas por semana se han reducido en más de un 60% desde el inicio del estado de alarma, un hecho que ha llevado a muchos propietarios a dar el salto al mercado del alquiler tradicional. De hecho, en la actualidad, 6 de cada 10 apartamentos turísticos, es decir, el 60%, han pasado a ser pisos de alquiler residencial.
¿Se incrementará el parque de viviendas en alquiler en 2021?
La incertidumbre acerca del futuro del sector, la dificultad para garantizar que los pisos turísticos cumplen con todos los protocolos estipulados por el Gobierno y las estadísticas, que pronostican que el sector turístico no se empezará a recuperar, como mínimo, hasta la Semana Santa del 2021, hace pensar que estos datos irán al alta. Se prevé que antes de acabar el año sean 7 de cada 10 pisos los que pasen al mercado del alquiler.
El resto, que supone el 30%, esperará al 2021 para ver cómo evoluciona el sector, ya que las modificaciones en la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) estipulan que si se firma un contrato de alquiler inferior a cinco años, el arrendatario tendrá derecho a prorrogarlo hasta llegar a este límite. Esta normativa, que favorece al inquilino en pro del propietario no acaba de convencer a muchos de ellos, que como apuntábamos, prefieren esperar a ver qué pasa.
Aunque todavía no se puede prever a cuánto ascenderán las pérdidas en el sector, la Federación Española de Asociaciones de Vivienda y Apartamentos Turísticos (FEVITUR) estima que rondarán los 2.900 millones de euros.
Estos datos tan poco alentadores han hecho que se estén reclamando al Gobierno ayudas y ciertas garantías para que el sector no acabe desapareciendo y, con él, millones de empleos y de negocios de las actividades derivadas del turismo.
Se prevén muchos cambios cuando la pandemia haya terminado; nuestra forma de vivir, de relacionarnos, de trabajar, de viajar y de invertir serán completamente diferentes. Veremos cómo queda el sector de los pisos turísticos, uno de los más afectados por la crisis generada por el Covid19.
Fuente: fotocasa